Mientras la tecnología avanza a gran velocidad, los hábitos y la cultura digital de las organizaciones parecen moverse más lento.

Durante años se pensó que las herramientas tecnológicas eran suficientes para proteger a los sistemas, pero la realidad demuestra que la principal debilidad sigue estando en las personas y la falta de capacitación.
Durante años, se ha repetido que la clave de la ciberseguridad está en la tecnología. Sin embargo, las cifras muestran una realidad distinta, confiar únicamente en softwares o infraestructuras avanzadas no es suficiente.
Según Kaspersky, detrás del 95% de las vulneraciones de datos hay un error humano, ya sea una contraseña débil, un correo abierto sin verificar o una mala gestión de permisos.
Pedro Oyarzún Recabarren, CEO de Egs-Latam, empresa de ciberseguridad e infraestructura TI, explica que:
“Existe la idea de que los ataques provienen de vulnerabilidades sofisticadas, pero la mayoría se origina en comportamientos y estafas repetitivas. La tecnología ayuda, pero no reemplaza los protocolos ni la educación en ciberseguridad”.
Según distintos estudios regionales de ciberseguridad, el 90% de las organizaciones en Chile no está preparada para defenderse de ataques informáticos.Además, el 80% de las medianas empresas no cuenta con servicios de protección de datos y el 63% no muestra interés en implementarlos, a pesar del aumento del 138% en incidentes reportado en el último año.

La Agencia Nacional de Ciberseguridad (ANCI) recomienda avanzar hacia gestión adecuada, capacitación continua y actualización tecnológica y normativa, prácticas que pueden reducir hasta en un 70% el riesgo de incidentes graves.
“La ley ha servido para visibilizar riesgos y elevar estándares mínimos, pero el gran desafío pendiente es cultural. Ninguna regulación puede reemplazar la disciplina digital del día a día”.
En este escenario, la ciberseguridad ya no puede ser tratada como un tema técnico exclusivo de los equipos TI. Se ha convertido en un componente estratégico para la continuidad y reputación de las empresas.




