Los Sony Future Filmmaker Awards (SFFA) son un certamen internacional creado para descubrir y apoyar a nuevos talentos del cine. Más que una competencia, funcionan como una plataforma que combina premiación, formación y mentoría, acercando a los creadores emergentes al pulso real de la industria audiovisual.
En este contexto, conversamos con Angelo Marconi, gerente de Marketing para la categoría de Digital Image Latam en Sony Electronics, quien explica la visión de la compañía en torno al concurso. Sus respuestas permiten entender el alcance de esta iniciativa y su impacto en una nueva generación de cineastas.

Durante la entrevista, abordamos el propósito del certamen, su alianza estratégica con Creo y el impacto que busca generar en la industria cinematográfica. También profundizamos en la formación que ofrece a los finalistas, la relevancia de la diversidad narrativa y las perspectivas de crecimiento que Sony proyecta para esta plataforma global.
Sony y Creo: una alianza estratégica para potenciar la creatividad global
Angelo Marconi explica que el respaldo de Sony a los Sony Future Filmmaker Awards responde a una visión que combina filosofía y estrategia corporativa. Desde la mirada de la compañía, no se trata únicamente de un certamen, sino de una iniciativa para consolidar un puente único entre talentos emergentes y la industria.
"Sony Corporation impulsa los Sony Future Filmmaker Awards porque entiende que la industria cinematográfica es, por esencia, colaborativa".
En esta primera idea, Angelo Marconi resalta que la esencia del cine está en el trabajo conjunto y en la capacidad de sumar múltiples miradas. Para Sony, esa colaboración es la base sobre la cual se construye cualquier iniciativa creativa de alcance global.
"Pero, más allá de un certamen, este programa se inspira en la filosofía japonesa de Kando: generar ese impacto profundo de emoción y asombro que surge cuando algo auténtico toca el corazón".
Aquí introduce el concepto de Kando como un valor central que guía a la compañía. No se trata únicamente de competir o de premiar, sino de provocar experiencias transformadoras que conecten con la sensibilidad de los creadores y del público.
"El propósito es conectar y abrir puertas a talentos emergentes y a profesionales en búsqueda de un puente con los referentes de la industria, un puente que solo Sony puede construir al contar con toda la cadena de producción creativa: desde la tecnología de Sony Electronics, hasta el poder narrativo de Sony Pictures".
En ese sentido, recuerda que la alianza con Creo tiene una historia compartida y un objetivo en común: crear comunidad y potenciar la creatividad.
"La colaboración entre Sony y Creo tiene historia y una visión, la cual es crear comunidad, a la vez este concurso cuenta con un enfoque de promover la creatividad".
En este punto, Marconi subraya que la alianza se construye sobre la base de un objetivo compartido: fomentar la comunidad y abrir caminos para que la creatividad encuentre nuevas formas de expresión.
"En la industria cinematográfica la colaboración se vuelve crucial, y estamos en constante búsqueda de nuevas voces y perspectivas. Esta plataforma busca captar el talento y potenciarlo, para así desarrollar programas para los nuevos creadores que contarán historias y a la vez nuevas formas de contarlas".
Marconi enfatiza que la diferencia frente a otros concursos está en la cercanía que Sony genera con los participantes.
"La visión de interconectar y crear comunidad, no solamente se piensa en una dar exposición a los exponentes, sino que tengan contacto directo con una productora tan grande como es Sony Electronics y las personas que hacen posible el desarrollo de contenido de diversos formatos, experiencia, retos de la industria, uso de la tecnología, entre otras cosas".
El impacto esperado, añade, va más allá del reconocimiento puntual y busca tender puentes sostenibles.
"El SFFA no solo premia, sino que tiende puentes. Ofrece a los cineastas contacto directo con ejecutivos, productores y líderes de opinión de la industria, permitiéndoles experimentar de primera mano los retos, la tecnología y los procesos que transforman ideas en historias".
Aquí Marconi enfatiza que la fortaleza del certamen radica en su capacidad de acercar a los nuevos talentos al corazón mismo de la industria, dándoles acceso a los actores que marcan las tendencias y a los procesos que definen la producción contemporánea.
"La diferencia está en que Sony no se limita a mostrar, sino que acompaña y conecta, creando un ecosistema donde el aprendizaje es integral y donde la emoción (Kando) se transforma en impulso creativo".

Categorías, cortometrajes y conexión directa con la industria
Al hablar de la estructura del certamen, Marconi detalla que la elección de categorías responde a un marco global que respeta la tradición de los festivales, pero que al mismo tiempo abre espacio a nuevas narrativas.
"La elección de las categorías parte de una lógica global: los festivales de cortometrajes tradicionalmente incluyen ficción y no ficción (documentales) como ejes centrales".
Con esto, Marconi explica que el punto de partida se inspira en la tradición de los festivales, donde el cortometraje ha sido siempre un formato privilegiado para la experimentación y la formación de nuevos talentos.
"Sin embargo, los Sony Future Filmmaker Awards amplían este marco con el propósito de reflejar la diversidad actual de la creación audiovisual".
De este modo, el certamen busca ir más allá de lo convencional y adaptarse a las nuevas dinámicas de producción, integrando la riqueza de voces y estilos que hoy forman parte del ecosistema global del cine.
"Por eso, además de ficción y documental, el certamen incorpora categorías para estudiantes, animación y formato futuro, este último concebido para producciones realizadas con smartphones, que hoy representan una herramienta creativa poderosa y accesible".
El enfoque en cortometrajes busca, además, democratizar la participación y ofrecer una vía accesible para los nuevos talentos.
"El enfoque en cortometrajes se debe a que este formato permite condensar ideas, explorar lenguajes emergentes y democratizar la participación, al ser una vía más accesible que los largometrajes para nuevos talentos. Así, el SFFA no solo reconoce la tradición de los festivales, sino que también impulsa innovación y apertura hacia las narrativas del futuro".
Este certamen, explica, actúa como un laboratorio para explorar lenguajes audiovisuales emergentes y anticipar las transformaciones de la industria.
"El SFFA actúa como laboratorio para nuevos lenguajes audiovisuales. Al abrir espacio a creadores jóvenes o independientes, favorece la exploración de temas y estilos que todavía no han llegado al circuito comercial, pero que anticipan las transformaciones de la industria".
En este contexto, uno de los grandes aportes es generar relaciones profesionales con ejecutivos y plataformas del ecosistema audiovisual.
"En la industria se habla de la necesidad de tener relaciones, el programa de Sony permite que los productores emergentes construyan relaciones con los ejecutivos de los estudios y los equipos de trabajo, además de otros talentos".
Formación intensiva: una semana de mentorías y aprendizaje inmersivo
El componente formativo es uno de los ejes diferenciadores del SFFA. Marconi señala que los participantes acceden a una experiencia intensiva que va más allá de la teoría y los aproxima directamente al pulso real de la industria.
"El aprendizaje es inmersivo y experiencial: vivir lo que sucede en los foros, escuchar directamente a productores y experimentar flujos de trabajo reales. La idea es que los participantes no solo aprendan técnicas, sino que sientan el pulso de la industria".
La selección de mentores y expertos se hace en función de las tendencias y necesidades que marcan la pauta en la industria audiovisual.
"El comité organizador determina necesidades de conocimientos o tecnologías en auge, de ahí se hace una selección de expertos que puedan mostrar su experiencia y contar su propia historia de lo que viven al ser productores. Qué mejor que las voces de ellos para detonar aún más el interés de contar historias".
Los finalistas, afirma, valoran especialmente el contacto directo con especialistas y la posibilidad de comprender los flujos de trabajo de una producción.
"Lo ven de gran valor, porque la elección de información a compartir es clave […] entender los flujos de trabajo que se tienen que seguir en una producción les abre el panorama de necesidades, y también retos y formas creativas de resolverlos. Además de poder encaminar correctamente la pasión por contar historias".
Además, el acompañamiento no termina con la semana intensiva, sino que se extiende en el tiempo.
"Sí, mediante redes de contacto, mentorías y continuidad. La filosofía es clara: una vez que entras en la comunidad SFFA, ya no caminas solo, porque la relación con Sony y con otros creadores se mantiene viva".
Diversidad, internacionalización y futuro del SFFA
Otro de los valores diferenciales del certamen es su accesibilidad y compromiso con la diversidad. Desde su origen, explica Marconi, se diseñó para ser gratuito y abierto a múltiples geografías y culturas.
"Para empezar la participación es gratuita, no genera un costo adicional para las personas que desean inscribir su trabajo, es algo que está definido desde el inicio del desarrollo del proyecto".
Los resultados, añade, se reflejan en la variedad de proyectos premiados, que muestran la riqueza cultural del cine global.
“La Diversidad Narrativa y Talento Emergente se vuelve crucial, y es tangible al ver proyectos premiados los cuales reflejan la riqueza cultural y narrativa del cine global”.
- My Demon de Rossana Montoya (Colombia)
- Travelling Home de Juliet Klottrup (Reino Unido)
- Hermanos Casablanca de Santiago O’Ryan y José Navarro (Chile)
- Rock Paper Scissors de Hayder Hoozeer y Franz Böhm (Reino Unido/Alemania)
“Cada obra representa una visión única que desafía el statu quo”.
En esta diversidad también se observa cómo las temáticas cambian según el contexto regional.
"Las obras presentadas revelan matices regionales: mientras algunos proyectos abordan problemáticas sociales con crudeza, otros priorizan la exploración estética o experimental. Esa pluralidad es justamente la riqueza que el certamen busca potenciar".
Finalmente, Marconi proyecta que el certamen seguirá evolucionando para responder al crecimiento natural de los estilos narrativos y de los talentos.
"El desarrollo de el concurso estimamos que siga creciendo justo por la diversidad de historias y talentos. Consideramos que la evaluación de estilos narrativos traerá la necesidad natural de crecer las categorías, eso es lo enriquecedor de este concurso que no es estático sino está en constante evolución".