El Movimiento B, presente en 102 países, lanzó un mensaje global a los líderes de la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP30). Esta comunicación surgió del Encuentro+B Amazônia 2025, celebrado en Belém do Pará, Brasil. El evento reunió a 750 líderes de 19 países, de los cuales el 30% representó a comunidades locales, como pueblos originarios y pequeños productores.
Este encuentro culminó con una carta colectiva. El escrito establece directrices y compromisos para enfrentar la crisis climática y promover la justicia socioambiental. Su objetivo es impulsar la transición hacia modelos económicos más equitativos, transparentes y responsables. La misiva representa una contribución colaborativa al Balance Ético Global. Esta iniciativa es liderada por el Presidente Luiz Inácio “Lula” da Silva, la Ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático de Brasil, Marina Silva, y el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres.

Las directrices principales de la carta incluyen un compromiso ético y global. Su fin es garantizar que la COP30 refleje la urgencia científica y el imperativo ético de proteger el planeta. Asimismo, el documento aboga por una transición justa.
La transición quiere promover un modelo socioeconómico inclusivo. Dicho modelo debe alinear las ganancias financieras con la responsabilidad social y ambiental, aparte de impulsar una economía regenerativa. También promueve una acción colectiva. Con ella se pretende movilizar a empresas, sociedad civil y gobiernos para la cooperación en acciones medibles. Esas acciones tienen el fin de armonizar el desarrollo, el bienestar social y los límites planetarios.

Además, el documento valora a los pueblos originarios y comunidades tradicionales. Se debe reconocer y fortalecer su protagonismo. Incluso, es necesario integrar sus conocimientos ancestrales y científicos a la toma de decisiones. João Bernardo Casali, copresidente de Sistema B Internacional, declaró:
“Como vimos con la llegada de la COP30, la Amazonía y América Latina fueron convocadas a liderar un mundo en crisis. Y es a partir de aquí, con nuestra diversidad, resiliencia y conexión con la naturaleza, que impulsamos a las empresas como agentes de cambio, utilizando la fuerza del mercado para contribuir al bien común”.
Por su parte, la copresidenta de la organización, Cecilia Peluso, destacó:
“Estamos en el umbral de una gran transformación. Acabamos de lanzar los nuevos estándares que, a partir de enero, elevarán el nivel de impacto y materialidad para la Certificación de Empresa B. Es un llamado a crecer en conjunto en nuestra capacidad de regenerar el planeta y la sociedad”.

El Movimiento B busca crear un sistema económico para poner el bienestar de las personas y el planeta en el centro de sus decisiones. Este movimiento cuenta con 10.000 Empresas B Certificadas y 1.017.000 trabajadores a nivel global. El ingreso anual de todas esas compañías asciende a USD 350.000 millones. Dentro de América Latina y el Caribe, se encuentran 1.300 Empresas B. El monto facturado de manera anual alcanza los USD 40.000 millones.
Las autoridades de la organización afirmaron en la carta: “Somos un movimiento global de empresas que redefine el éxito empresarial, considerando el logro financiero junto con el bienestar de la sociedad y del planeta. Representamos una comunidad de líderes que usan sus negocios para construir un sistema económico más inclusivo, equitativo y regenerativo”.

Los líderes de Sistema B reforzaron la urgencia de transformar el modelo económico. Subrayaron la responsabilidad y oportunidad de empresas, inversores y gobiernos para alinear el lucro con la regeneración y la innovación con la justicia social.
El mensaje escrito también sostiene que los conocimientos de los pueblos y comunidades tradicionales son una inspiración. Es más, su forma de hacer negocios es un ejemplo para las Empresas B. Ese ejemplo demuestra un liderazgo empresarial comprometido con la construcción de un sistema económico más inclusivo, equitativo y regenerativo.

La carta se entregó como un mensaje al mundo de cara a la COP30. Allí, se expresó: “Desde el Movimiento B ofrecemos nuestra colaboración integral para que esta sea realmente la COP de la implementación. Existen y pueden aplicarse soluciones concretas cuando hay voluntad política, involucramiento del sector privado y genuina participación de la sociedad civil”. El Encuentro+B Amazônia 2025, bajo el lema “La raíz del futuro”, se desarrolló entre el 3 y el 5 de septiembre en Belém.
Vía comunicado de prensa