Además de ofrecer apoyo en la gestión de cumplimientos de las normativas de cada país, estas pólizas buscan mitigar las consecuencias financieras en empresas y personas naturales, frente a la proliferación de incidentes.
Este cambio requiere no solo inversiones tecnológicas, sino también un programa de capacitación, gestión del cambio y estrategias bien definidas que permitan la adopción y el uso eficiente de estas herramientas.