Thiago Araki, en su columna, subraya cómo la IA, junto al código abierto, puede impulsar innovación segura, sostenibilidad y colaboración ética, siendo clave para mitigar riesgos y construir un futuro responsable.
En un informe elaborado junto a Ipsos[1], la compañía reveló que países como Chile (53%) y México (43%) se distinguen por su alto nivel de adopción de inteligencia artificial.
Probablemente lo más relevante es fomentar la transparencia en los procesos de IA para permitir y facilitar su control, manteniendo la confianza de quién la utiliza, dice el vocero.
En 2025, las empresas latinoamericanas incrementarán significativamente la adopción de IA para impulsar la innovación y mejorar la eficiencia operativa, destaca el ejecutivo.
Comprender el potencial de estas herramientas y cómo aplicarlas puede marcar la diferencia entre una adopción pasiva de la IA y una implementación activa que maximice su valor.