Intel anunció que su planta de fabricación Fab 52, ubicada en Chandler, Arizona, ya está totalmente operativa. Desde este complejo se producirán los nuevos Intel Core Ultra serie 3 y Intel Xeon 6+, conocidos internamente como Panther Lake y Clearwater Forest.
Con esta infraestructura, la compañía busca reforzar su capacidad de manufactura avanzada en Estados Unidos y acelerar su hoja de ruta tecnológica.

¿Por qué Clearwater Forest marca un punto de inflexión en la tecnología de servidores?
Clearwater Forest será el primer procesador de servidores basado en la tecnología Intel 18A, una plataforma de clase 2 nanómetros que promete un cambio relevante en rendimiento y eficiencia. Diseñado para centros de datos de hiperescala, servicios en la nube y telecomunicaciones, integrará hasta 288 núcleos eficientes (E-cores) y ofrecerá una mejora del 17 % en instrucciones por ciclo (IPC) frente a su antecesor.

De acuerdo con Intel, esta arquitectura permitirá un incremento sustancial en densidad, rendimiento y ahorro energético, contribuyendo a que las organizaciones escalen sus cargas de trabajo, reduzcan costos operativos y desarrollen soluciones más inteligentes.
Tanto Panther Lake como Clearwater Forest estarán construidos sobre el nodo Intel 18A, descrito por la empresa como el proceso de semiconductores más avanzado fabricado en Estados Unidos. Esta tecnología ofrece 15 % más rendimiento por watt y 30 % más densidad de chip que el nodo Intel 35, y servirá como base de al menos tres futuras generaciones de productos para clientes y servidores.

El nodo 18A incorpora las tecnologías RibbonFET, que aumenta la densidad de transistores, y PowerVia, un sistema de distribución de energía que optimiza la interconexión interna del chip. Ambas innovaciones forman parte del plan “5 nodos en 4 años”, con el que Intel busca recuperar su liderazgo en el sector de manufactura de chips.

Lip-Bu Tan, director ejecutivo de Intel, destacó:
"Estamos viviendo una nueva era de la computación, impulsada por avances en la tecnología de semiconductores que definirán el futuro durante décadas".
Intel busca transformar el sector tecnológico mediante innovación, diseño avanzado y producción local. La compañía apunta a consolidar su liderazgo global con un enfoque en eficiencia energética, sostenibilidad y autonomía industrial dentro de Estados Unidos.
"Las plataformas de próxima generación, junto con nuestras capacidades líderes en manufactura y empaquetado avanzado, son catalizadores para la innovación mientras construimos un nuevo Intel".

La estrategia combina manufactura avanzada, nuevas arquitecturas de chips y expansión productiva. Intel prioriza el rendimiento, la eficiencia y la escalabilidad para enfrentar la creciente demanda de cómputo en centros de datos y dispositivos de próxima generación.
"Estados Unidos ha sido siempre el centro de nuestra investigación y desarrollo, y estamos orgullosos de expandir nuestras operaciones nacionales para llevar nuevas tecnologías al mercado".
La Fab 52 es la quinta planta de producción de gran escala que Intel ha construido en su campus Ocotillo, en Arizona. Además, mantiene operaciones en Nuevo México, Ohio y Oregón, aunque ha reducido su expansión internacional.

La compañía decidió cancelar proyectos en Alemania y Polonia, y cerró su planta de ensamblaje y pruebas en Costa Rica, tras un proceso de reestructuración interna motivado por una caída en su cuota de mercado y ajustes financieros.

Durante el último año, Intel también ha ejecutado varias rondas de despidos y advirtió que podría pausar o cancelar el desarrollo de los nodos Intel 14A y sus sucesores, debido a restricciones presupuestarias. Pese a estos desafíos, la empresa confía en que Clearwater Forest y la adopción de Intel 18A sean los pilares de su recuperación y consolidación tecnológica.